Septiembre y octubre son los meses en los que se producen más incendios en las viviendas ocupadas por estudiantes—especialmente entre las 5 y 9 p.m. La mayoría de estos incendios ocurren al cocinar.
Entre el 2015 y el 2019, los departamentos de bomberos de los Estados Unidos respondieron a un total anual estimado de 3,840 incendios en estructuras como dormitorios, fraternidades, sororidades, y otras propiedades relacionadas.
Siga estos sencillos pasos para mantenerse a salvo:
- Asegúrese de que su habitación y otras áreas comunales tengan detectores de humo que funcionen.
- Practique un plan de escape ante un incendio. Conozca dos posibles maneras para salir de una habitación, de un apartamento o de una vivienda.
- No cocine si tiene distracciones. Esto puede llevarle a cometer un error y provocar un incendio.
- Use únicamente velas sin llama.
- Mantenga despejadas todas las salidas, los pasillos y las escaleras.
- Limpie el colector de pelusas de la secadora antes y después de usarla. Las rejillas tapadas son consideradas un peligro de incendio.
- Asegúrese de que tanto usted como sus compañeros de cuarto conozcan un lugar seguro en su dormitorio o vivienda, para encontrarse en caso de que tengan que salir del área.
- Al escuchar una alarma salga del lugar rápidamente. Aunque sea un retraso corto puede ser un peligro. Déjelo todo y salga del lugar.